Hace un tiempo los rayos del sol se consideraban saludables, hasta que aprendimos sobre los peligros que pueden ocasionar. El exceso de sol puede causar arrugas, pecas, cambios en la textura de la piel, vasos sanguíneos dilatados y cáncer.

Los Rayos del sol

El sol emite diferentes tipos de radiación y una de ellas se denomina radiación ultravioleta (UV). Los rayos UV que alcanzan la superficie de la tierra se dividen en tres:

  1. UVA: penetran profundo en la piel hasta la dermis, donde generan radicales libres que provocan alteraciones celulares y causan el envejecimiento prematuro de la piel (arrugas, manchas y falta de elasticidad), además de provocar cáncer. Es la responsable además del bronceado inmediato. Tiene la capacidad de atravesar el vidrio. Es la que más comúnmente se encuentra en las cámaras bronceadoras.
  2. UVB: penetra menos profundo en la piel que los UVA, sólo a la epidermis. Provoca enrojecimiento de la piel, quemaduras y bronceado después de unos días de la exposición. Es indispensable para la síntesis de vitamina D. Es bloqueada por el vidrio común. Se puede filtrar con gafas, ropa y protectores solares. El número que comunmente se encuentra en los envases de protector solar se refiere a la protección contra la luz UVB.
  3. UVC: normalmente es bloqueada por la capa de ozono y en condiciones normales no debería llegar a la atmósfera, pero con su deterioro, los rayos UVC están llegando a la superficie de la tierra y pueden producir cáncer de piel.

Recomendaciones para protegerse del sol

  • Evita la exposición entre las 10 am y 4 pm
  • Busca la sombra siempre que puedas.
  • Vístete apropiadamente. Aunque la mayoría de la ropa absorbe o refleja los rayos UV, la de color blanco y de algodón y la ropa mojada no ofrece mucha protección. Usa un sombrero de ala ancha, mangas largas y gafas de sol con protección UV.
  • Usa un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de 15 o mayor.
  • Aplícalo 20 minutos antes de salir al aire libre y luego cada dos horas si vas a permanecer allí y además después de nadar o hacer ejercicio vigoroso.
  • Evita las cámaras bronceadoras.
  • Examina tu piel de pies a cabeza cada mes.
  • Ten un examen profesional de la piel cada año.

Efectos nocivos del sol

Las quemaduras solares: provocan ardor, dolor, hinchazón y ampollas. Desafortunadamente no existe una cura rápida. Pueden aliviarse un poco conla aplicación de compresas frías y lociones calmantes.

Bronceado: se confunde a menudo como un signo de buena salud, pero en realidad es el resultado del daño que el sol produce en la piel. Las cámaras bronceadoras son tan malas como el sol. La mayoría usan lámparas ultravioleta A y los estudios han demostrado que los rayos UVA penetran más profundo en la piel y contribuyen a las arrugas prematuras y cáncer de piel.

Envejecimiento: las personas que trabajan al aire libre o se broncean con frecuencia sin protección pueden desarrollar una piel gruesa y acartonada y aparentan más edad de la que en realidad tienen. El sol también produce pecas y placas escamosas que pueden convertirse en cáncer de piel después de muchos años de la exposición al sol. Es especialmente importante proteger a los niños del sol ya que la mayoría del daño ocurre en los primeros 20 años de vida.

Arrugas: a mayor exposición al sol, más arrugas. El envejecimiento asociado a la exposición solar se llama Fotoenvejecimiento. El envejecimiento relacionado con el simple paso de los años se llama Cronoenvejecimiento.

Cáncer de piel: más del 90% de todos los cánceres de piel ocurren en zonas expuestas al sol. Los tres tipos más comunes son: Carcinoma Basocelular, Carcinoma Escamocelular y Melanoma.