Caída del cabello

Todas las personas pierden aproximadamente entre 50 a 100 pelos cada día. Sin embargo por diferentes motivos este número puede aumentar y producir zonas más claras o parches con poco pelo.

¿Qué causa la pérdida de cabello?

Existen muchas razones. Cuando la pérdida de cabello comienza de repente, la causa puede ser debido a enfermedad, dieta, alguna medicina o postparto. Si la pérdida de cabello es gradual y se hace más evidente con cada año que pasa, la causa puede ser una alopecia de tipo hereditaria. Para aclarar el origen de la caída es muy importante visitar al dermatólogo.

Los tratamientos cosméticos como tinturas, alisados y el uso de secador de pelo o plancha muy caliente pueden maltratar, reventar, y secar el cabello, pero no ocasionan caída del mismo.

Las causas más comunes de caída del cabello

La calvicie hereditaria (o también llamada alopecia androgenética) es la causa más común de la pérdida de cabello. Se distingue porque en los hombres se observan entradas en la frente y/o disminución del pelo en la coronilla. En las mujeres la cantidad de pelo disminuye visiblemente en la parte superior de la cabeza y normalmente se empieza a notar porque el pelo se adelgaza y el partido o raya del peinado se va ensanchando.
La alopecia areata se cree que es una enfermedad autoinmune (lo que significa que el cuerpo se ataca a sí mismo), en este caso, el cuerpo ataca su propio folículo. Esto causa áreas lisas, redondas y sin pelo en el cuero cabelludo y otras áreas del cuerpo. La persona con alopecia areata a menudo no presenta ningún otro signo de enfermedad. La mayoría de las veces el pelo se recupera completamente después del tratamiento.
Alopecia Cicatricial (que deja una cicactriz) es una enfermedad que destruye los folículos pilosos de una persona y el tejido va siendo remplazado por una cicatriz, por lo que el pelo en esas zonas no puede volver a crecer. El tratamiento va enfocado a disminuir o detener la inflamación que destruye los folículos pilosos.
Tratamientos del cáncer como la radioterapia y la quimioterapia pueden causar la pérdida de cabello. Esto a menudo es temporal, pero puede causar gran angustia.
La tiña del cuero cabelludo es una enfermedad es producida por un hongo, es contagiosa y común en niños. Se caracteriza por una placa redondeada de algunos centímetros de diámetro con escamas, costras y pelos muy cortos. Se trata con medicamentos orales y se cura completamente.
La Tricotilomania es un desorden médico hace que la gente se hale y arranque repetidamente su propio cabello; el paciente debe ser evaluado adicionalmente por un psiquiatra.
Dentro de los ciclos de crecimiento normal del pelo, hay una fase de caída llamada Fase telógena. Cuando el número de pelos que se encuentran en esta fase aumenta, se llama “efluvio telógeno“. Si dura dos o tres meses y se recupera cuando se resuelve el problema de base se llama “eluvio telógeno agudo”. Puede ser el primer signo de una enfermedad como el hipotiroidismo. También una cirugía mayor, fiebre alta, una infección severa, sangrado abundante o hasta la gripe pueden causar la pérdida de cabello transitoria. Cuando esta pérdida de pelo dura más de 6 meses se llama Efluvio telógeno crónico.

Algunas causas de Efluvio telógeno:

Tres o cuatro meses después del parto, algunas mujeres tienen pérdida de cabello importante causado por la disminución en los niveles de estrógeno. Generalmente es temporal y luego de unos meses el pelo crece de nuevo.
Durante la menopausia, debido a los cambios hormonales se puede perder volumen y densidad en el pelo. Los folículos pilosos como todo el cuerpo se va envejeciendo, por esto, una mujer de 50 años de edad o más, generalmente no puede esperar que su pelo tenga la misma vitalidad que cuando estaba más joven.
El estrés luego de experimentar un acontecimiento traumático (p.ej., la muerte de un ser querido o un divorcio) puede causar la pérdida de cabello.
Las dietas y la mala alimentación pueden provocar pérdida de cabello; después de perder más de 7 kilos se deben evaluar las deficiencias nutricionales para que puedan ser corregidas.
Exceso de vitamina (A) por tomar demasiados suplementos vitamínicos. Se mejora al interrumpir el medicamento.
Falta de consumo de proteína, ya sea por dietas estrictas o mala nutrición. Es importante consumir ya sea fuentes animales de proteína como las carnes, pollo, huevos y pescado, o incluso los vegetarianos pueden obtener más proteína añadiendo nueces, semillas, fríjoles, lentejas y quinua a su dieta.
Disminución del hierro en la sangre la cual puede llevar a la pérdida de cabello especialmente en algunas mujeres con sangrados menstruales abundantes, personas con hemorragias gastrointestinales o después de cirugías donde hubo mucho sangrado. Las fuentes vegetarianas de hierro son cereales fortificados, soya, semillas de calabaza, fríjoles, lentejas y espinaca. Las carnes rojas, las ostras y el hígado son fuentes animales de hierro.
Los trastornos alimentarios: cuando una persona sufre de anorexia (no comer lo suficiente) o bulimia (vomitar después de comer) puede generar pérdida de cabello debido a la malnutrición.
Medicamentos anticoagulantes, medicinas para la artritis, depresión, hipertensión, para bajar de peso, píldoras para dormir, o el corazón o el uso de esteroides anabólicos (medicamentos tomados para construir el músculo y mejorar el rendimiento atlético) son sólo algunos ejemplos de medicamentos que pueden dar caída del pelo.
La interrupción de píldoras anticonceptivas frecuentemente causa un aumento en la caída del cabello.

Tips para el cuidado del cabello:

Evita la decoloración frecuente, las permanentes o los alisados.
No uses secadores y planchas para el pelo a altas temperaturas ya que pueden hacer hervir el agua en el centro del tallo piloso dejándolo frágil y propenso a la rotura.
Ten cuidado con los cauchos y ganchos, te pueden reventar el pelo.
Evita los peinados con el cabello apretado por largos periodos de tiempo: llevar una cola de caballo o trenzas durante muchos años pueden causar un tipo de pérdida de cabello conocida como alopecia por tracción.
No es conveniente seguir aquel viejo consejo de pasar el cepillo 100 veces en un día. Puede maltratar y reventar tu pelo.
No frotes excesivamente tu cabello mojado con una toalla para secarlo. Hazlo suavemente y desenrédalo con un peine de dientes separados.

¿Cómo diagnostican los dermatólogos la pérdida de cabello?

Como tantas cosas pueden causar la pérdida de cabello, el dermatólogo actúa como un detective. Si la pérdida de cabello pasó de repente o gradualmente, qué medicinas toma, qué alergias tiene y si ha estado haciendo dieta. Sus ciclos menstruales, hemorragias, embarazos y menopausia. También mirará con cuidado el cuero cabelludo, la zona de la cabeza en la cual se ha caído el pelo y el grosor de este, pues son puntos definitivos a la hora de hacer el diagnóstico. Algunas veces es necesario arrancar un mechón para hacer una prueba que se llama tricograma. Es frecuente que se soliciten análisis de sangre y en unos pocos casos puede ser necesaria la toma de una biopsia.

Tratamiento

Lo importante es tener clara la causa para hacer un tratamiento adecuado. Mientras más rápido se empiece el tratamiento mejores resultados se tendrán. La pérdida de cabello es más difícil de tratar cuando está avanzada.

Los medicamentos más comúnmente usados son:

– Minoxidil: se aplica en el cuero cabelludo a concentraciones del 2% y 5%. Puede hacer que el pelo no se siga adelgazando y estimular el crecimiento del pelo en la coronilla. Puede combinarse con otros medicamentos para hacer más efectivo el tratamiento y mejorar la penetración de estos en la piel.

– Finasteride: bloquea una hormona llamada dihidrotestosterona (DHT) y ayuda a reducir la pérdida de cabello en un 88% de los hombres y estimula el crecimiento de pelo nuevo en el 66% de los hombres. En un pequeño porcentaje de pacientes puede producir disminución del deseo sexual y en un 1% de los casos impotencia.

– Antiandrógenos como la espironolactona: Bloquean las hormonas masculinas y son útiles en algunas mujeres con pérdida de pelo de causa hormonal.

– Vitaminas y suplementos dietarios: si se detecta una deficiencia de hierro, zinc, Vitamina D, Vitamina B 12, Selenio y otros oligoelementos, debe suministrarse un suplemento.

– Corticosteroides: si la pérdida de cabello es causada por inflamación como la Alopecia areata, se usan infiltraciones con esteroides o lociones de uso diario.